De Reporteros.
Los cazadores de mitos aseguran que una placa de metal no para una bala, pero cuando no te toca, como dice el dicho “aunque te pongas”. Así le ha ocurrido a un elemento de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) del Distrito Federal, que prácticamente volvió a nacer, pues durante un enfrentamiento con delincuentes una bala que iba directo a su pecho fue detenida por su placa de policía.
Sobre el caso la Secretaría de Seguridad Pública de esta ciudad indicó que el elemento Juan Daniel Ruiz Coi, de 39 años de edad y nueve de servicio, participó en las albores de vigilancia del Viernes Santo, en Iztapalapa y luego se sumó a labores de vigilancia nocturnas en la patrulla p98-07, en el Cuadrante O.2.5.10, perteneciente a la UPC Tezonco.
Según la declaración que rindió, dijo que alrededor de las 23:00 horas, y al circular sobre la calle Ozuna, al cruce con España, colonia Cerro de la Estrella, un ciudadano quien conducía un Volkswagen, Sedan de color blanco le solicitó auxilio ya que unas personas armadas lo habían despojado de sus pertenencias y aún estaban en la zona.
Ante el auxilio pidió apoyo por la frecuencia de radio, en tanto que se aproximaba al punto señalado por la víctima, donde pudo notar la presencia de varios individuos, que al verlo llegar corrieron en diferentes direcciones.
Tuvo que elegir y siguió uno de ellos, aunque para su suerte de policía el presunto ladrón dio media vuelta con pistola en mano e hizo al menos siete disparos que hicieron blanco en la unidad policial.
Producto del ataque, la unidad P98-07 presenta seis impactos de bala en cristales, toldo y portezuela, en tanto que el policía Ruiz Coy, quien portaba su chaleco antibalas, recibió un disparo que ingresó por un costado, a la altura de su hombro izquierdo, arrancó un escudo y alojó la ojiva en el broche de la placa que portaba en el pecho, lo que evitó que la bala penetrara a su corazón o pulmones.
Aún con la herida sangrante, el policía bajo de la patrulla y realizó varios disparos, pero, indicó, que el agresor forzó una vivienda, se introdujo y logró escapar por las azoteas, al tiempo que llegaron más elementos en su apoyo, quienes pidieron la presencia de una ambulancia.
Debido a que no sabían la magnitud de la herida el policía fue trasladado al hospital Belisario Domínguez, y de ahí posteriormente un helicóptero del Agrupamiento Cóndores lo condujo al Hospital Mocel.
Ya cuando lo revisaron los médicos se sorprendieron al ver que presentaba un impacto de bala en el pecho, pero sin penetración, pues presuntamente la bala fue detenida por la placa del elemento policiaco, de manera que ya es conocido entre sus compañeros como el policía que volvió a nacer, pues esta bala iba dirigida a su pecho y pudo haberle quitado la vida, pero simplemente como por obra de un milagro fue detenida por la placa.
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