Se trata de un proyecto de una escultura monumental que está viva, asemeja una serpiente que engalana arteria de gran afluencia vehicular en el Distrito Federal. Son decenas de miles de plantas con las que se reverdecerá la selva de concreto, como parte de un proyecto ecológico, económico y artístico.
Escultura que está viva y por lo tanto requiere de cuidados; se tiene estimado que tendrá una vida de cerca de diez años, pero la idea es que perdure por muchos más, para lo cual se utiliza tecnología de vanguardia, probada que hace pensar a futuro.
Las primeras esculturas, obra de Fernando Ortiz Monasterio, se pueden apreciar en el cruce de avenida Chapultepec y Sevilla, así como en Paseo Tamarindos en Santa Fe. Es un proyecto ecológico, económico y artístico a favor de la mejorar la calidad del aire.
Con lo que costó la “Estela de Luz” (más de mil millones de pesos) se podrían haber construido 1,800 esculturas verdes, con un invaluable impacto positivo para el medio ambiente de la ciudad de México, apuntó Ortiz Monasterio.
Para mejorar la calidad del aire en la ciudad de México, y pintar de verde un panorama de cada vez más concreto, vale la pena probar diferentes alternativas, señala VERDMX, asociación civil que impulsa esculturas monumentales con plantas.
“Es más que una filosofía, es una muestra de la diversidad botánica de México, y que la gente de anime a hacer sus propios proyectos de jardines verticales”, expresaron Gabriela Rodríguez, de VERDMX, Javer Caballero, director del jardín Botánico de la UNAM, Octaviano Domínguez, de la Academia mexicana de bioética, Klaus German, asesor y el propio Ortiz Monasterio.
El proyecto “Respira” contempla cinco esculturas más que serán colocadas en puntos, aún no determinados, indicó Ortiz Monarterio.
VERDMX realiza acciones ambientales buscando interferir y provocar en la ciudadanía una llamada de atención, una toma de conciencia, un sentido de pertenencia y al final del día, una actitud más responsable y de amistad cívica con su ciudad, con su espacio público y con el medio ambiente, dijo Gabriela Rodríguez.
Respira es un ejercicio creativo interdisciplinario: intervención en el espacio público con soluciones ambientales urbanísticas de vanguardia para provocar interacción y responsabilidad social.
“Respira” es un recordatorio para todos los habitantes de la ciudad, de que "mejor aire es mejor economía", y de que, para respirar mejor, es imprescindible una actitud congruente con el cuidado ambiental en una responsabilidad compartida, donde todos (gobierno, empresas y sociedad civil) somos imprescindibles y protagónicos. Todos queremos una ciudad y un país más verde, con menor consumo de energía, con un mejor manejo de residuos, con mayor transporte público de calidad, con mejor transporte privado no contaminante, entre muchos otros temas más.
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