miércoles, 14 de septiembre de 2011

Un llamado a invertir en educación (columna A TU ELECCION )


Columna publicada en www.chicagonoticias.com 

Durante el tiempo que el doctor Juan Ramón de la Fuente fue rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) no se cansó se llamar a invertir en educación, lo mismo ha hecho el actual rector de nuestra máxima casa de estudios, un llamado bien fácil para los legisladores, quienes están a punto de recibir el paquete económico bajo el cual decidirán cuánto dinero se destina a cada Secretaría de Estado, a cada programa social, a salud, a la lucha contra el crimen organizado, pero sobre todo a educación, un tema neural para cualquier país que presuma de ser avanzado, al menos así lo indican los estudios de porqué algunas naciones tienen altos estándares en su calidad de vida, en sus productos, incluso en sus políticos; mientras que en México aún vivimos en la prehistoria del avance, en el México donde no cuaja la democracia, donde la corrupción es pan de cada día sumado al burocratismo de las oficinas públicas, donde personal sindicalizado principalmente se aburre entre café, pláticas y siestas, mientras miles de ciudadanos esperan en largas filas para hacer un trámite.

Pero todo tiene un origen, un punto de partida que es la educación, precisamente esa que está bajo la tutela de un secretario de estado, Alonso Lujambio, que no había logrado avance alguno en su trabajo como titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP) pero ya se desgañitaba en eventos de su partido, el derechista Acción Nacional, llamando al gobernador del Estado de México a dar la cara. Hoy somos millones de mexicanos, quienes le pedimos a este señor secretario de Educación que dé la cara y explique con qué dinero hizo su campaña para ser candidato de su partido a la presidencia de la República, en qué tiempo, si cuando fue nombrado secretario de estado aseguró que todo su tiempo sería para atender la educación de este país, donde aún hay analfabetismo tanto en la formación académica y peor en el tecnológico, el país reprobó exámenes básico de conocimientos en matemáticas y español, mientras Alonso Lujambio se sentía el ungido por Acción Nacional y el presidente Felipe Calderón para pelear la presidencia de la República en 2012.

Al final Alonso Lujambio salió a dar ese discurso gastado, soso y carente de brillantez, el mismo que el secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, “las encuestas no me favorecen”, pues claro que no le favorecían, ¿cómo le van a favorecer? si en educación estamos reprobados,  nuestros niños no son capaces de usar las operaciones básicas para resolver un problema de la vida real y menos entienden un texto a pesar de haber aprendido a juntar letras los últimos seis años, lo que es evidente no basta. Alumnos reprobados en la   Evaluación Nacional de Logro Educativo (ENLACE), donde se dice que seis de cada diez niños de primaria, ocho de cada diez en secundaria y seis de bachillerato aún obtienen niveles de insuficiente y elemental.

Pero quién ha reprobado realmente, pues claro que el país; y no se trata de que tengamos niños incapaces, sino autoridades educativas pésimas. Tan solo ver que en la prueba aplicada a 14 millones 64 mil 814 niños y jóvenes del país, un número importante apenas alcanza el grado de calificación elemental. Falta poco más de un año para que termine el sexenio, pero el secretario de Educación Pública (SEP), Alonso Lujambio Irazábal, apenas pidió iniciar un diagnóstico para buscar qué está pasando en las escuelas particulares de educación básica, por sus resultados, que llamó  "inquietantes" en la materia de Español.

Peor es el caso de las zonas más pobres, donde 8 de cada diez niños están en niveles de insuficiencia y elemental; hoy más que nunca resuenan en mi cabeza algunas frases escuchadas a un alto ejecutivo de Nissan México, quien expresó que en Japón lo más importante es el capital humano, y que ningún dinero gastado en preparar a una personas es mucho. Ojalá este modesto soliloquio pueda significar algo en el Congreso mexicano a la hora de decidir el monto a educación, pero también para el presidente de la República, Felipe Calderón, que hizo cambios hace una semana en el Gabinete, pero no por causas de resultados, sino por movimientos políticos tendientes a tener un candidato a la presidencia de la República.  (massangre@yahoo.com.mx, twitter: @antoniodemarcel, dereporteros.blogspot.com)

domingo, 11 de septiembre de 2011

Justicia para periodistas


Antonio De Marcelo Esquivel.
La lentitud con que trabaja la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal para esclarecer el asesinato de las periodistas Marcela Yarce y Rocio González Trápaga, hizo que este domingo decenas de periodistas marcharan por las calles para exigir la detención de los asesinos y las garantías necesarias para el ejercicio periodístico.
La marcha se desarrollo en medio de ciclistas, oportunistas y con un clima nublado, por el Paseo de la Reforma con rumbo a la Secretaría de Gobernación, donde la exigencia ha sido que el estado mexicano otorgue las garantías necesarias para ejercer el periodismo y que se esclarezca el crimen del las periodistas Marcela Yarce y Rocío González Trapaga.
La cita fue a las 11:00 a los pies del Ángel de la Independencia, de donde partiría esta marcha, aunque la presencia de un político que la semana pasada fue cesado, hizo que muchos prefirieran irse a casa, ya que él había convocado en el Monumento a la Revolución, pese a ello otros comunicadores, principalmente del Estado de México  se quedaron en solidaridad con el director de la publicación Contralinea y los familiares de las periodistas.
Luego a las doce partió esta marcha si camino rumbo a la Secretaría de Gobernación, mientras que desde los altavoces colocados en la parte superior de una camioneta se escuchaban consignas y un discurso respecto a la inseguridad que priva en el valle de México y el clima en que cientos de periodistas desarrollan su trabajo.
En tanto los comunicadores caminaban lento, algunos con pancartas como una que decía: “ni uno más, los periodistas del Estado de México exigimos seguridad, alto a las agresiones” mismos que iban al frente de un ataúd y una corona de flores donde se podía ver la foto de las periodistas Marcela y Rocio con la leyenda “Exigimos justicia”.
En esta marcha hubo además una enorme manta del periódico El Día, que decía en apoyo a los periodistas se une a la pena…, además se pudo ver por ahí a Fernando Fuentes del programa de Radio Fronteras de la Ciencia, que al lado de Miguel Badillo, director de ContraLínea camino esta marcha.
El resto de comunicadores portaba pequeñas pancartas con un moño negro y los nombres de las dos comunicadoras; y lo mismo decenas de fotógrafos se sumaron a esta caminata cuya exigencia es que el procurador capitalino Miguel Ángel Mancera encuentre a los asesinos.
De esta manera la caminata llegó hasta Bucareli, y en la Secretaría de gobernación fue entregado un documento dirigido al titular de la política interior del país, donde se exigen garantías para quienes ejercen el periodismo de campo.

lunes, 29 de agosto de 2011

COLUMNA: TU ELECCION


Por Antonio De Marcelo Esquivel.

  • Queman el Casino Royale, y Gobernación va contra casas de juego.
Dicen que el hombre es el único animal que puede tropezar no una, varias ocasiones con la misma piedra, ya nos había ocurrido en la Ciudad de México: Se quemó el Lobohombo y muchos murieron porque la salida de emergencia estaba bloqueada, luego la discoteca News Divine, policías impidieron la salida y ahí va otras decenas de muertos, qué decir de la Guardería ABC, donde hubo que chocar una camioneta para hacer una salida de emergencia. Entonces qué pasó en el Casino Royale ¿Por qué la salida de emergencia estaba cerrada? ¿Quién o qué impedía salir por ese lugar y salvar la vida? Pues nada menos que un grupo de asesinos a sueldo que tenían la consigna de no permitir que alguien saliera con vida de ese lugar, cuyos dueños aparentemente se habían negado a dar un aumento al derecho de piso que pagaban al crimen organizado. Las respuestas a muchas incógnitas saldrán a la luz con el paso del tiempo, si es que hay voluntad política de poner tras las rejas a los responsables directos e indirectos de esta matanza cuyo número es hasta ahora de 53 víctimas más los desaparecidos. Un indignante caso, pues de acuerdo  a lo que pudo conocer este columnista, los pirómanos llegaron a la entrada que es el área de  bingo y las maquinitas, donde se dice había más personas, principalmente mujeres y ancianos, quienes al percibir el fuego y el humo corrieron hacia los baños, mientras que personal del lugar se tiró al piso como se les indicó en simulacros; desde ahí escucharon lo que todo mundo asegura fueron granadas y por supuesto los disparos que se hicieron luego, aunque parte de lo que se escuchó como explosiones tuvo que ver con un tanque de gas que reventó y una televisión que se cayó, no se sabe si el número de muertos hubiera sido menor, lo que si es que habrían sido más, porque en la puerta de emergencia varios hombres armados apuntaban para disparar a quien siquiera se asomara, aunque luego se marcharon cuando el fuego se propagó el siguiente piso. La mayor parte del suceso debe haber quedado registrado en la memoria de las cámaras de seguridad, pues como en muchos lugares los monitores tienen amplia visión de lo que ocurre, sin embargo persiste la duda de que las autoridades abran el expediente o permitan que se ahonde en el caso, tema en el que mucho tienen que explicar los jefes policiacos de seguridad pública municipal y de tránsito, cuyos agentes en sendas camionetas estuvieron estacionados junto al liceo que está a un lado, y otras más enfrente, lo que no es una casualidad, como tampoco que esa misma tarde hubieran estado en el casino los principales socios del lugar, entre ellos unos tales: Madero y Rocha, quienes se marcharon una hora antes de ocurrir el ataque ¿Qué traían entre manos? Nadie lo sabe, como tampoco se tienen detalles de por qué en el noveno piso del edificio de enfrente, que es un estacionamiento había un francotirador, que incluso ahí vivía y que ahora desapareció, lo mismo ha ocurrido con los gerentes del lugar, argentinos, peruanos, chilenos y venezolanos, que posiblemente ya no estén en el país, mientras que un puñado de trabajadores del Casino Royal buscan quién les responda. Por el momento se sabe de acercamientos entre los empleados que sobrevivieron con el Sindicato de la Central Revolucionaria Obrera Campesina (CROC), quienes defenderían los intereses de los trabajadores, aunque la primera expresión ante ellos fue: “Eso les pasó por votar por el cambio”, luego fueron citados para cobrar su quincena y posiblemente su finiquito justo frente al Casino Royal, lo que evidentemente ha sido de muy mal gusto. Por la noche de este domingo trascendió que elementos del Ejército Mexicano interrogaron al director operativo de la Policía Regia, Miguel Mascorro Adame, mismo que habría dado información para detener a Carlos Alberto Oliva y/o Nazario Mendoza Velázquez, mejor conocido como La Rana, probable autor intelectual del ataque al Casino Royale, todo por órdenes de los capos Heriberto Lazcano Lazcano, alias El Lazca, y Miguel Ángel Treviño Morales, alias El Z-40; no obstante nada se habla de los autores materiales, quienes habrían salido por la puerta trasera del estado mientras se daba el arribo de unos 3,500 federales en helicópteros, vehículos blindados y patrullas, aunque tarde , como siempre, pues desde el día del ataque al Casino Royale sólo ocurrió una balacera y después no se ha dado cuenta de ejecutados, colgados o descabezados, que han sido el pan nuestro de cada día en Monterrey.   (www.Chicagonoticias.com, (massangre@yahoo.com.mx, twitter: @antoniodemarcel)

miércoles, 24 de agosto de 2011

Cuántos somos “un pinche asalariado de mierda”

Por: Antonio De Marcelo Esquivel.
Vivir una injusticia es un infierno, justo el que vivimos muchos mexicanos cuando nos presentamos  una oficina pública, o cuando nos enfrentamos a un ciudadano de esos que “tienen influencias”, son ricos, o simplemente son amigos o familiares de policías, o viven en el pasado cercano de tener nexos de algún tipo con diputados o senadores, porque piensan que  el fuero es extensible y que ellos gozan del mismo, al menos así lo pudimos constatar millones de mexicanos que vemos la tele por las noches. Por supuesto que no fue una sorpresa, conocemos hasta dónde puede llegar una persona venida a más y con unas copas de alcohol encima. Ver este video causa una confusión de sentimientos, entre entre risa, ira y desesperanza, porque muestra a nuestra sociedad desnuda, enferma y carente de sensibilidad ¿Por qué? Pues porque las frases ofensivas hacia los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública son el reflejo del pensamiento social de unos cuantos que por viajar en auto creen que pueden hacer menos a los cuidadores del orden, que no son más que otros ciudadanos pero vestidos de policía y con la nada fácil tarea de enfrentar a la delincuencia, lo que por supuesto no es fácil, menos cuando te enfrentas a dos panteras alcoholizadas como este par de mujeres, que en su inocente percepción del México de hoy creen que  un policía es el culpable del país que tenemos y que ganar seis mil pesos por jugarse la vida cada día los convierte en “un pinche asalariado de mierda”, se desconoce cuál sea el oficio de este par, aunque de seguro no ganan 57 pesos diarios, pues la camioneta Jeep negra en que viajaban las gentiles damas cuesta no menos de 350 mil pesos. “Chinga tu madre, pinche asalariado de mierda", fue la frase más decente que le dijeron a los elementos de la policía uniformada y casi estoy seguro que el cuidador del orden no sometió a la mujer porque había una cámara, lo que debía haber ocurrido, porque a la vista de cualquier persona que se precie de respetar la ley alteraron el orden público, lo que es una falta administrativa, al menos la conductora iba en ostensible estado de ebriedad, lo que equivale a unas 36 horas en el centro de retención “El Torito” y de haberlas seguido de seguro se pasaron algunas luces en rojo, porque las señoritas estaban de fiesta. Los policías ahora enfrentan un proceso para saber ¿por qué? no actuaron, que de haberlo hecho de seguro hora serían criticados por usar la fuerza en contra de estas finísimas damas, el video de ellas pude ser visto en youtube como Ladies de Polanco y si quieren ver otro de igual magnitud esta uno identificado como “me la pelas” donde otro ciudadano e hijo enfrentan a policías. Que vergüenza, pero es el país en que vivimos.

lunes, 15 de agosto de 2011

A TU ELECCION.


Por Antonio De Marcelo Esquivel
Diálogos ciudadanos o show.
Desearía que los actos de mi Presidente fueran serios, lo que necesitamos para creer que la política es un tema respetable, pero nuestros representantes populares ya se encargaron de acabar con el poco respeto que alguna vez tuvimos por ellos en México; peor cuando prendo la televisión y me encuentro con un programa llamado Diálogos Ciudadanos, claro, uno piensa primero que de pronto aparecerá Laura de América gritando “que pase el desgraciado”, quizá Rocío Sánchez Azuara, la conductora de Televisión Azteca, con sus voz tipluda que taladra y regaña como si contara con una calidad moral intachable, pero no, en su lugar el que da cara es el conductor Leonardo Curzio para dar paso uno a uno a cien mexicanos que habrían sido traídos desde distintos puntos del país a conversar con el Presidente de la República, Felipe Calderón Hinojosa, un privilegio al que sólo accedió hace unas semanas el poeta Javier Sicilia. Y sin embargo ni el poeta ni estos cien mexicanos aprovecharon para hacerle saber al primer mandatario lo que unos cien millones de mexicanos desearían señalarle, tal  como un empleado más de la administración pública, que por cierto, si alguien lo a olvidado cobra su salario y lo hará hasta la muerte de los impuestos nacionales. Pero no, para el Ejecutivo federal fue como un día de campo, puesto que su equipo se encargó de contactar a estas personas por medios que nadie conoce, como una supuesta estudiante del estado de Nuevo León que vestida como para ir de fiesta le preguntó ¿cuáles son los planes para el resto de su administración? Cuando unos siete millones de los llamados “Ninis” (que no estudian ni trabajan) quizá hubieran cuestionado la político educativa y cobertura en educción superior, que en el Valle de México dejó fuera de las universidades a unos 200 mil jóvenes en edad productiva. Otra de las invitadas agradeció haber ingresado al Seguro Popular y por el mismo tenor pasaron el resto de invitados a este diálogo, donde muchos mexicanos hubieran querido ingresar. Tal vez la señora Patricia Torres, que desde hace 35 años cotiza para el Instituto Mexicano del Seguro Social, y cuando sólo necesitaba el retiro de miomas en la matriz, los médicos cometieron tal error que la han enviado a casa sin una pierna; tal vez esas tres esposas del municipio de Ecatepec, Estado de México, cuyos maridos fueron sacados a punta de pistola por elementos de las fuerzas federales para acusarlos de delincuencia organizada entre otros delitos, y que hasta los visitaron en el penal veracruzano al que fueron enviado, estos policías querían saber quién informó a la prensa del suceso, mientras un ministerio público de dudosa reputación aceptó la puesta a disposición y envió su expediente hasta Jalisco: señor Presidente, dirían estos mexicanos que gustosos lo mirarían a los ojos en estos “Diálogos ciudadanos”. Hay quien dice que estos programas producidos con dinero de los mexicanos apenas son el comienzo de un sesudo proyecto, al que se agrega, dicen, otro  ideado por la secretaria de Turismo, en el cual el propio Felipe Calderón, Presidente de México es único protagonista de deportes extremos, que empezarían  a ser proyectados por medios masivos precisamente en los Estados Unidos por ahí de fines de Septiembre próximo.
(contacto: massangre@yahoo.com.mx, twitter: @antoniodemarcel)

lunes, 8 de agosto de 2011

A TU ELECCION, columna para www.chicagonoticias.com

columna: A TU ELECCION, publicada en 
www.chicagonoticias.com
Antonio De Marcelo Esquivel
Legisladores traidores.
Insuficientes las universidades.
La violencia que se ha desatado a lo largo del país necesita ya una estrategia real con capacidad de contener las crecidas fuerzas que adquirió el crimen organizado, porque hasta ahora parece que es realidad que el Gobierno mexicano ha luchado con piedras, mientras los malosos obtienen armamento más Rápidos y más Furiosos. El reclamo de una estrategia diferente que detenga la cifra de muertos por este fenómeno es generalizado. Sin embargo, por efecto mediático solo un hombre ha logrado sentarse a dialogar con el primer mandatario, a quien con voz de poeta, lágrimas por un hijo perdido y escapularios en mano ha pedido recapacitar, pedir perdón y sacar al Ejército de las calles, el mismo llamado fue hecho la semana pasada a los legisladores, quienes conocedores del impacto que tendría recibir a este poeta venido a luchador social lo recibieron, lo mismo para ser apapachados por este besucón personaje, cuya propuesta fue muy clara: que la Ley de Seguridad Nacional fuera discutida con la sociedad civil, que a fin de cuentas es la directa interesada. Pero parece que a los legisladores únicamente les interesaban las cámaras de televisión, frente a las cuales pidieron perdón por no haber hecho lo suficiente frente al baño de sangre que vive México. Luego todo mundo se fue a casa, el poeta para seguir con este viacrucis personal y ellos a  hacer lo suyo, leyes que no se sabe a los intereses de quién sirven, pues a pesar de los llamados a regresar el Ejército a los cuarteles y que la policía haga su trabajo, se votó a favor de una Ley de Seguridad Pública Nacional, con la que el mismo poeta que los había besado unos días antes ahora los llamaba “traidores”. Pero ellos se defendieron, le mandaron decir que se asesorara primero, pues votaron la ley en lo general, reservándose los artículos para su discusión uno a uno.
Para los que saben, esta ley tiene como objetivo modificar artículos de la misma con la finalidad de legitimar la presencia del Ejército en las calles, pues el espíritu de dicha ley es dar sustento legal al trabajo de inteligencia, uso de información para detectar posibles amenazas a la seguridad nacional y por supuesto el uso de las fuerzas armadas en lo que llaman seguridad interior, pero sin descargar la responsabilidad que tienen los estados y municipios, hoy por hoy rebasados e infiltrados hasta la médula por el dinero e influencia del crimen organizado.
El pero es que mientras los legisladores se enfrascan en una lucha de intereses, el secretariado ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) suspendió la entrega de la segunda partida presupuestal del Subsidio para la Seguridad Pública Municipal (Subsemun).
Con esto 172 municipios en diferentes estados de la República Mexicana, incluido el Distrito Federal no recibieron dinero para dar cumplimiento a las obligaciones que tienen con la Ley General y para luchar contra el crimen organizado.
Quienes sí recibieron presupuesto fueron 48 municipios, que como niños buenos en salón escolar tuvieron estrellita y recursos por un total de 376 millones 860 mil 236 pesos, mientras el crimen organizado crece como una plaga.
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Frente a las instalaciones de la Secretaría de Educación Pública un grupo de no más de 500 jóvenes, algunos de estos con sus respectivos padres hacen campamento, no cerraron los accesos a la dependencia educativa, pero ahí se quedaron con la esperanza que el titular de Educación, Alonso Lujambio atienda sus necesidades de ingresar a las universidades, cuyos lugares fueron insuficientes para estos muchachos que sí creen que la educción es el motor del crecimiento nacional. Pero llevan ya cuatro marchas, un plantón de cuatro días y parece que la sensibilidad de Alonso Lujambio no le ha permitido un diálogo directo, quizá porque sus preocupaciones están más ligadas a sus aspiraciones de ser el abanderado  de su partido (Acción Nacional ) a la Presidencia de la República, que atender a estos jóvenes que duermen en la calle, comen  a pie de banqueta y gritan que no desean tener como únicos caminos: ser policías o sicarios.

jueves, 9 de junio de 2011

Hay quien si merece un periodicazo o varios pero literalmente.



Por: Antonio De Marcelo Esquivel.
-Que una señora, que esta allá abajo quiere poner un periodicazo.
Así me lo dijo el vigilante, pero le respondí:
-Aquí no se ponen periodicazos, reporteamos y publicamos; aunque luego recapacité: “él no tiene la culpa, solo me avisa”, de manera que le pedí pasar a la mujer, tenía unos minutos antes de ir a comer.
Ya cuando la tuve enfrente con su carita de sufrida y su folder hecho un chicharrón mirándome como si no supiera cómo empezar le pedí sentarse y antes que iniciara le aclaré lo que al vigilante:
-Aquí no damos periodicazos, informamos. Pero solo me miró con cara de me valen madre las definiciones y quizá ni entendió lo que quise decir.
Luego fue tan solo escuchar su relato que me di cuenta su necesidad profunda de justicia, que si hubiera sido mi caso la exigencia hubiera sido más bien venganza frente a la felonía cometida al amparo de estar frente a un grupo.
Y es que esta desesperada madre de familia ya había recorrido oficinas públicas de educación, contralorías internas, y hasta un periodiquito de esos locales en el municipio de Ecatepec para denunciar al profesor Gabriel González Ortega.
No me gusta ver llorar a la gente, menos cuando sus lágrimas son de impotencia, justo lo que ahora estaba ocurriendo frente a mí, una mujer fuerte con tres hijos que sacar adelante, pero que poco había podido en contra del director de la escuela primaria Juan de la Barrera, en el desarrollo habitacional Los Héroes IV.
  Yo ya había escuchado hablar del tema este del bullyng en las escuelas primarias, hasta vi algunos videos grabados por jovencitos, y cosas peores como abusivos que le pegan a los más débiles, lo que suele suceder en las escuelas y que se ve como cosa normal hasta que uno sale de esa escuela o se faja y termina con el abuso.
Sin embargo este caso es diferente, Me llamo Josefina Mejía Tapia, vengo del municipio de Ecatepec, me dijo como si llenara un formulario y casi sin mirarme a los ojos, más bien con la vista a otro lado sin dejar de tocar sus papeles, aunque luego tomó un poco de confianza y narro con lujo de detalles la pesadilla que vivió su hija mayor y ahora sus dos hijos más pequeños.
Una aterradora historia que indigna solo de escuchar como el profesor Gabriel González Ortega participó de las agresiones al señalar a la niña en sexto año de primaria solo por su color de piel y quizá un poco de peso.
Un acoso persistente, porque si algo es evidente nadie puede aguantar que el encargado de darle educación le diga: “Negra”, “haitiana”, “gorda” o “marrana”, entre otros calificativos.
U martirio al que se sumó relegarla y hasta echar a perder un momento de suma importancia como debía ser la salida de sexto grado, y es que Gabriel González Ortega dijo a la chica: “cómo vas a presentarte con un vestido morado, vas a parecer piñata, puerca asquerosa”.
Recordar estas frases aún causa tremendo dolor a esta madre, quien tiene aún a otra hija y un hijo inscritos en esta escuela que tiene a su cargo el director José Humberto Elizondo, del que dice: “no ha hecho nada, y cuando algo sucede junta firmas de madres de familia para lavar sus culpas y se diga que no ocurren cosas en el interior del plantel”.
En esta entrevista la señora Josefina Mejía, asegura que al pedir una explicación el mismo director le reclamó a la menor “dijimos que no dirías nada, que todo quedaría dentro del plantel”.
Pero no solo es el profesor quien agrede a los menores, su otro hijo fue golpeado por la maestra María Elena Saldivar Chimil, aunque por su trabajo esta madre de familia conoció el caso hasta más de una semana después; el argumento de la maestra fue que el menor llevara gorra, aunque el menor le había explicado “mi mamá no tiene dinero para la peluquería”.
Pero no puedo con él, aseguro esta mujer, que afirma que el mismo Gabriel González la mira con burla cuando habla de denuncias, se dice compadre del candidato a gobernador priista Eruviel Ávila
Según documentos presentados por esta madre de familia ha recurrido a la Comisión Nacional de Derechos Humanos, a la contraloría de la Secretaría de Educación Pública del estado de México y a la oficina de Ecatepec, Estado de México, pero tal parece que si este profesor y director nada los mueve del plantel.
Así mientras los niños son agredidos por sus profesores, mientras el dinero es desviado con la complicidad de mesas directivas y mientras miles de niños viven un martirio el Secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio se hace campaña para ser candidato a la presidencia de la República, en tanto que en la Secretaría de Educación Pública del Estado de México nada se mueve porque están en campaña.
Al final me trague mis palabras, esta mujer si necesita darle a más de uno un periodicazo.

miércoles, 8 de junio de 2011

Viejo Puente mató a dos, parece que el sistema mata a más.

Viejo Puente mató a dos, parece que el sistema mata a más.
Antonio De Marcelo Esquivel.
Cada cada día un accidente o el crimen organizado y hasta el desorganizado dejan una saldo rojo en cualquier parte del país, quizá por ello a nadie tomó por sorpresa la caída de un puente en el Estado de México, que causó la muerte de dos personas, lesiones graves a cuatro más, una de las cuales perdió ambas piernas.
Nota para los diarios policíacos, pero mala nota para la Procuraduría General de Justicia del Estado de México, donde la impunidad y falta de profesionalismo va desde la policía investigadora, pasa por el servicios periciales, médicos y probablemente hasta el encargado de la procuración de justicia y su oficina de prensa.
Y es que acudir a cubrir este tipo de notas puede volverse cotidiano, normal ver uno o varios muertos, policías o servidores que impiden el trabajo periodístico, ocurre en muchas ciudades, incluido el Distrito Federal.
Lo que no pude ser normal es convertirse en testigo de un acto poco ético, como mantener el cuerpo de una persona horas ahí tirado en la vía pública, sea cual sea la razón, primero: porque merece respeto; segunda:  porque existe una oficina encargada de ese trabajo, con personal que tiene un salario y tercero: porque desde ahí empieza la eficacia del sistema de justicia.
Es así que las notas reflejaron el accidente, más poco se habló de la falta de atención, capacidad y reacción del ministerio publico y los servicios periciales de la Procuraduría del estado de México, que nuevamente se mostraron incapaces de reaccionar, al tardar casi dos horas en llegar al periférico norte a la altura de Santa Mónica para iniciar las investigaciones y diligencias en el caso de la caída de este puente peatonal, tiempo que las víctimas quedaron ahí.
No lo digo yo, lo denunciaron vecinos y autoridades municipales de Tlalnepantla, lugar en donde sucedió la tragedia; lo peor es que aseguran: esto ya es una costumbre por parte del personal de la procuraduría General de Justicia del Estado de México, (PGJEM), encabezada por Alfredo Castillo Cervantes, debido a que esta zona del estado de México se ha visto envuelta en una ola de delitos que van desde el robo, asaltos, secuestros y homicidios que en la mayoría de los casos se quedan impunes por la pobre o nula actuación del ministerio publico mexiquense, como lo han denunciado organizaciones como México Unido Contra la Delincuencia y el Sistema Nacional de Seguridad Pública.
El estado de México es de las entidades que durante el último año presento un incremento solo en el rubro de homicidios de aproximadamente el 80% en comparación del mismo periodo del año pasado.
Estos datos son de misma institución encargada de investigar y perseguir a los responsables de estas ejecuciones ha tenido nulos resultados.
Y es que la Procuraduría de Justicia del Estado de México es encabezada por Alfredo Castillo Cervantes, controvertido funcionario que se desempeñaba anteriormente como subprocurador y quien fue el responsable de la investigación en el caso de la pequeña Paullete Guevara Farah, caso que le costó la salida al anterior Procurador mexiquense y que Chicagonoticias.com siguió muy de cerca.
En esta entidad, los municipios de Nezahualcoyotl, Ecatepec de Morelos, Cuatitlan Izcalli y Naucalpan son los que han registrado las jornadas más violentas en lo que va de los primeros cinco meses del año.
Lo grave de acuerdo con algunas organizaciones civiles y con las propias autoridades es que las ejecuciones que se han presentado son con el sello de las que se registran en entidades donde los grupos de narcotraficantes tienen una guerra sin cuartel y en donde los decapitados, mutilados y hasta desollados son los mensajes que dejan a sus contrarios.
En el caso del estado de México desde hace varios meses apareció un grupo delictivo auto denominado la “Mano con ojos “responsable de por lo menos la mitad de los más de 200 asesinatos registrados en lo que va del año.
Además 13 de las personas ejecutadas eran elementos de la policía municipal, estatal o ministerial, en muchos de los casos sus asesinos dejaron mensajes en donde señalaban a los agentes como traidores o protectores de algún grupo de la delincuencia organizada, el 90% de estos asesinatos no han sido resueltos por la Procuraduría de Justicia encabezada por Castillo Cervantes.
Otro de los grandes pendientes que también tiene la Procuraduría mexiquense es en  materia de los delitos de género principalmente en contra de las mujeres de acuerdo con un estudio y análisis del congreso del estado de México, mismo que señala:  durante la actual administración se han cometido más de 950 feminicidios y poco más de 4 mil 500 violaciones de estos, dicen algunos legisladores, solo el 17% han sido resueltos, cifra que niega la oficina del procurador Alfredo Castillo Cervantes  y a quien los diputados ya le pidieron un informe sobre el avance de las investigaciones desde marzo pasado pero aún no ha sido entregado.
A un día del llamado Día de la Libertad de Expresión, así las cosas en esta entidad, que en breve tendrá nuevo gobernador, del que seguro tendremos muchos que platicar.

jueves, 5 de mayo de 2011

De la Olivetti al Ipad.



Por: Antonio De Marcelo Esquivel.
Los puristas del periodismo dicen que la nota está en el lugar de los hechos, hay que salir de la redacción, ir a romperse la madre a las entrevistas banqueteras, esperar al funcionario a la puerta de la dependencia, quizá hacer antesala y al tenerlo enfrente ametrallarlo con preguntas hasta que suelte prenda. Pero los tiempos han cambiado, se han transformado de tal manera que el periodismo que hacíamos hace 20 años no es el mismo que hoy. Pese a todo, aún puedo escuchar el tableteo de las máquinas de escribir por la tarde cuando había que aporrear teclados para entregar la nota, algunos habían tomado clases de mecanografía, de esas que daban a las señoritas en secretariado e incluso hasta quienes aprendieron taquigrafía para apuntar mientras el funcionario dictaba una conferencia o una entrevista, el resto escribíamos como dicen: de a dedito, pero no menos veloces. Entonces los únicos avances tecnológicos era el teléfono y el fax en el mejor de los casos, para las redacciones quedaba el telex con esas kilométricas cintitas amarillas picoteadas que contenían las notas de agencias y del extranjero. En esas épocas aprender a hacer periodismo ocurría en la calle, tal como lo hizo el maestro Metinides, ícono de la fotografía policiaca, quien afirma que con su primera camarita tomó fotos a un accidentado y acudió a venderlas a La Prensa, para luego viajar en ambulancia, carros de bomberos o policías para lograr fotografías que se convirtieron quizá en la época de oro del diarismo de nota roja. Aún tuve la fortuna de verlo en acción, lo mismo que al Padrecito (Bernardo Reyes), un viejo fotoperiodista de mil batallas, que todas las noches viajaba en un viejo Volkswagen y como si se teletransportara era el primero en llegar a los casos de nota roja. Al ser yo nuevo en el oficio me acercaba para conocer algún detalle del asunto y siempre sacaba su libretita del bolsillo para decir “como no padrecito, mira fue un masculino o femenino, -según fuera el caso- de tal edad, con tales heridas, y dice la policía que fue ultimado así, mira ahí están los familiares”, a quienes teníamos que entrevistar, claro con mucho tacto, pues estaban viviendo un momento de mucho dolor, y por supuesto con el tiempo adquiría uno técnicas para aprovechar los primeros momentos, la confusión, nadie sabe quién es quién en el lugar de los hechos, porque pasado el momento alguna autoridad domina el lugar corre a los reporteros o bien no falta el familiar o amigo influyente que corre a todo mundo.   Esas noches de trabajo denominadas  la guardia en la patrulla, eran como la escuela nocturna, fueron mis mejores clases. Llegar a las 19:00 al diario y salir con el fotógrafo a la Cruz Roja en Polanco, donde ya estaban fotógrafos y reporteros de otros periódicos en espera de un caso, hasta que en una o varias claves en la radio, con frecuencias de la Cruz Roja, Bomberos y Policía nos ponían en alerta, una adrenalina que empieza a correr por las venas desde el momento en que alguien decía Z-1 en tal lugar que en clave de la policía es muerto o bien 14 que en la Cruz Roja es muerto también y como si fuésemos un comando armados de cámaras y grabadoras corríamos a la ambulancia R-11, que es la clave del periodista ahí. El ulular de la ambulancia era la señal de emergencia para salvar semáforos, contra flujos o tráfico hasta arribar al sitio donde había que recoger detalles máximos y si era posible por el tiempo dictar la nota a la guardia en la redacción, claro la coronación de cada caso eran las palabras, que para uno eran como mágicas, casi una droga: “dicta la nota, paren prensas cambia la portada”, entonces solo podían pasar dos cosas que otra nota matara la primera o irse a casa con la satisfacción de haber cumplido con el deber, dormir un poco, porque en unas horas había que empezar de nuevo. Hoy el teléfono celular, las computadoras, el ipad, la radio, el internet, los portales, el twitter y el facebook obligan a la inmediatez, pero no por eso el periodismo debe ser menos apasionante, aunque ahora las exclusivas únicamente duran unos minutos cuando bien nos va. 
(massangre@yahoo.com.mx)

viernes, 8 de abril de 2011

CUÁNTOS ESTAMOS HASTA LA MADRE?




Antonio De Marcelo Esquivel.
Tenía que ir a la marcha convocada por el poeta y escritor Javier Sicilia, a la que desde Cuernavaca, llamó tras la muerte de su hijo; pero mi ron estaba tan rico que me hubiera gustado que el Chapulín, tuviera un gran ventanal (ya no es suficiente el Wi Fi), y desde ahí pudiera reportear, sin que fuera necesario ir a soportar el calor de la tarde, pero ni modo apuré mi trago, mastique los pequeños hielos y le pagué a Hilario. No me molesta ir a estas cosas, nunca me ha molestado, incluso cuando más harto estoy de todo una buena marcha me llena de energía y me revive las ganas de hacer periodismo, sobre todo desde que por decisión propia tomé una cámara para captar mis propias fotos, lo que es diferente, pero igual de apasionante que sentarse a la computadora para redactar la nota. Iría solo, pero Manuel, el reportero de nota policiaca accedió acompañarme y aunque ya teníamos el tiempo encima caminamos tranquilos por la Alameda Central hasta el Palacio de Bellas Artes, donde los últimos contingentes ya caminaban hacia 5 de Mayo con rumbo al Zócalo de la Ciudad de México, así que cortamos por Francisco I. Madero hasta darles alcance cuando iban a entrar a la plancha del Zócalo. En lo personal suelo escuchar sus consignas con atención, antes las anotaba en una libretita para repetirlas en mi nota, pero han sido tantas marchas y la creatividad de los marchistas tanta que me aprendí de memoria hasta el sonsonete: “Si zapata viviera con nosotros estuviera” o “México se casan de tanta pinche tranza”; bueno en honor a la verdad ahora se aprendieron otras no tan creativas pero con el mismo golpe silábico, dignas de un plantón del Frente Popular Francisco Villa.
No es la primera marcha contra la inseguridad que cubro, estuve en aquella del silencio y de blanco que colmó el paseo de la Reforma cuando el empresario Martí había dicho a los funcionarios “si no pueden renuncien”, incluso en una convocada por el doctor Manuel Ramírez, y en las dos el origen fue el mismo, sus hijos habían sido secuestrados y muertos por manos criminales, aunque mientras el doctor apenas pudo llevar un puñado de payasos al Zócalo para hacerse ver, el empresario Martí logró convocar a cientos de miles a través de organizaciones civiles; y que decir de doña Isabel Miranda de Walace que detuvo a los secuestradores de su hijo y ahora Javier Sicilia que logró replicar una marcha desde el estado de Morelos en 50 ciudades, de ellas unas 14 en Europa y los Estados Unidos, porque como gritaban en esta última manifestación “estamos hasta la madre”.

Casi nunca o creo que nunca eh coreado sus consignas en el ejercicio periodístico, ya pasaron aquellos tiempos de la prepa cuando salí con cinco compañeros y ese era el contingente de la Prepa 3 de Molina en una gran marcha del Consejo Estudiantil Universitario, tiempos cuando me desgañitaba para reclamar “Educación primero al hijo del obrero”, fue hasta ahora que me detuve a pensar en mi naturaleza de ciudadano y comprendí lo difícil que de pronto es separarse de la nota, sobre todo cuando las razones sobran, claro México esta hasta la madre, y aunque redacté la nota con la mayor objetividad obligada, entre los dedos se me resbalaban los recuerdos de aquella ocasión cuando me dijeron por teléfono que mi hermana había recibido un tiro en la cabeza, lo que derivó en su muerte un día después; la vez que me dijeron de nuevo vía telefónica que mi hermano había sido levantado y se pensaba que podría ser un secuestro, mismo que duró unas 15 horas; el día que desapareció mi otro hermano de fuera de la escuela y no apareció sino hasta otro día con la cara desfigurada por la golpiza que le propinaron o bien cuando me llamaron de casa para decirme que otra vez habían robado un camión a mi papá, sucesos que se han ido sumando a otros pequeños pero no menos importantes como los atracos que mis sobrinos han sufrido en los micros, o bien los secuestros en taxi que en lo personal eh vivido a manos de la delincuencia, eso sin contar las amenazas telefónicas de cobardes que prometen una muerte violenta, Claro, “estamos hasta la madre” y aunque la objetividad no me permite hablar en primera persona en el diario, me reflejo en cada uno de esos marchistas que con pancarta en mano transforman sus rostros en voces como el grito desesperado de  Eduard Munch, que pintó apenas en 1893, pero que tiene tanta vigencia.  

lunes, 4 de abril de 2011

En el periodismo ver es lo más importante.

Antonio De Marcelo Esquivel.
Esa mañana llegue al diario como siempre, al punto de las diez de la mañana y ante la falta de un buen crimen que investigar para las notas de la tarde caminé a la sala de prensa con mi amigo y compañero de correrías Noél Alvarado además el fotógrafo Salvador Chavez.
Si no había más tendríamos que buscar ún caso al que darle seguimiento, retomar alguno o bien hallar una buena historia en los asuntos del día mientras los minutos pasaban. De pronto se escuchó por la frecuencia de radio policial que un hombre había sido asesinado en su casa de la colonia Balbuena y por cierto estábamos muy cerca, de manera que abordamos el bocho y nos trasladamos reportaba. Para entonces ya teníamos tácticas de trabajo a fin de colarnos hasta el escenario del crimen, ver directamente a la víctima y recoger detalles del escenario para la crónica del día siguiente, así que decididos bajamos del carro y llegamos hasta la puerta donde preguntamos por el occiso, indicándonos un paramédico, que estaba al fondo de la casa, y que la mujer en la sala era su esposa.
Los tres llegamos hasta la bodega. el fotógrafo hizo algunas tomas y nosotros datos del hombre con camisa y corbata que bocarriba presentaba un orificio en el pecho. Al salir de esa bodega ya había llegado la policía investigadora, pero al ser amigos nos permitieron mantenernos a su lado mientras buscaban detalles que les indicaran la mecánica del asesinato.
Las primeras luces las dio la mamá, quien relató que esa mañana durante el desayuno su esposo increpó al hijo su falta de interés en la escuela y los quehaceres, de manera que ordenó a madre e hijo acudir a la escuela preparatoria y recoger las calificaciones.
Aseguro la madre que salieron juntos y harían el camino juntos, pero él hijo pidió regresar a cambiar zapatos por tenis y que la alcanzó en la escuela, donde la dejó en espera a la puerta, de la que se retiró porque no lo miraba salir.
Al llegar a casa su otro hijo había hallado ya a su padre muerto. La primer especulación de la policía es que la familia había salido, y en esta ausencia uno o varios ladrones entraron a la casa siguieron al padre de familia y lo acorralaron en la bodega, donde le hicieron un disparo causándole la muerte. Sin embargo algo no cuadraba, lo que nos hizo preguntar por el cuarto del hijo ausente y por alguna causa nos dieron acceso. Fue ahí donde hallamos la primera evidencia de un escalofriante caso de parricidio, aunque no claro aún, los tenis del joven preparatoriano tenían unas gotas casi imperceptibles de sangre, lo que avisamos de inmediato a los agentes de la Policía Judicial y al Ministerio Público, que ordenó recogerlos como evidencia.
El resto fue mero trámite, nos tiramos al piso en el comedor y pudimos ver que alguien había lavado sangre, sobre todo porque la jerga fue arrojada atrás de unos tanques de gas aún con agua sanguinolenta.
Era claro, el joven no sabría cómo explicar sus bajas notas, así que regresó y disparó contra su padre, para luego alcanzar a mamá y al volver todos creerían que alguien había entrado a robar. Por cierto el joven ya no regreso a casa esa tarde, por la noche llamó diciéndose secuestrado, mientras en el diario se cocinaba esta nota que una vez más me cubría de gloria, no obstante que el director me dijo esa noche “me la voy a jugar contigo, si no es parricidio como aseguras nos vamos los dos” y nos la jugamos porque la cabeza del día siguiente fue PARRICIDIO.
Esa noche el joven hijo llamó a casa para decir que había logrado escapar y aunque pensaba que tenía todo bajo control cayó en la trampa de la policía que ofreciéndole protección lo interrogó al llegar a casa. Durante las horas que duró el interrogatorio terminó por confesar que volvió a casa tomó la pistola de papá y se la vació por la espalda, era seis tiros que yo nunca vi, porque emocionado de haber ayudado a resolver un caso en breve tiempo no me tomé la molestia de ir a revisar el cuerpo al forense y conocer las causa de la muerte. Cuando le dije al director que si era parricidio y el hijo le había vaciado el cargador respondió: ¿Cuántos balazos te faltaron? Cinco, respondí, entonces me miró a los ojos y me anunció -Te vas cinco días suspendido.   

domingo, 27 de marzo de 2011

El crimen perfecto ¿existe?

Presuntos Responsables.
Por Antonio De Marcelo Esquivel.
Cuando salió a la luz pública la película Presunto Culpable no me quedó más que echarle un ojo, aunque no esperaban nada que no hubiera visto en estas dos décadas de ejercicio periodístico; y es que sentarse de este lado del escritorio en esas tardes cuando hay que redactar las notas es otra parte de hacer la chamba, aceptar que tu jefe te pida entrevistar a un denunciante que te va a quitar un tiempo valioso que podrías usar para redactar con calma, quizá para limpiar tu correo, hacer algunas llamadas o simplemente responder a los amigos en la Face o en el twitter, aunque de pronto me entraba esa sensación de que podría al menos escuchar a las personas, porque igual ni les publican su denuncia, ya sea por falta de espacio, porque son muchísimas, por que se traspapelan o bien por que quien tomó el recado ni siquiera la redactó y el papelito donde apuntó se perdió por ahí y quedó en el olvido, quizá es por ello que coloqué una silla frente a mi lugar para recibir a quien se presente a la hora que sea, total minutos más minutos menos en esta vida. Es así como he logrado recabar decenas, quizá cientos de historias que luego platico a los amigos, en las reuniones, aunque vistos de lejos ya no son tan dramáticos como escucharlos a viva voz de quien sufre una pena. Gente que se sienta en este lugar a derramar lágrimas, a sonreír forzadamente para no llorar, a decir sus intimidades a un desconocido, a ver si se le ablanda el corazón y escribe unas líneas que los funcionarios puedan ver a través del diario y al menos los reciban, que dejen de ser cifras, votos o víctimas de mercenarios del poder, una historia en cada persona, en cada familia que viven dramas dignos de ser novelas, películas, libros o al menos de una nota perdida por ahí entre el aviso oportuno y la nota roja que tanto le choca a las albas conciencias o los paladines de la democracia, aunque esta sea de café o de internet.
Y siempre la escena es recurrente lo mismo que los personajes, casi los mismos, ciudadanos abusivos que conscientes de que viven en México se pasan la ley por el arco del triunfo y si son familiares, amigos o hasta solo por ser vecinos de políticos pues ya son influyentes, porque al fin el fuero es extensible, ya sea de un policía, aunque sea de crucero, un Ministerio Público, el chofer de un diputado, senador o el amigo de un vecino que trabaja en la delegación, así se las gasta la justicia en México y no se diga si en verdad se trata de un legisladores u otro funcionario público, que primero buscan el voto y luego se olvidan de quien los llevó al poder justo cuando reciben la jugosa quincena. Una percepción monetaria que no dejarán aunque en ello les valla el honor, que por cierto muchos ni conocen. 
Para contar esta historias habría que pensarlas bien, seleccionar una, la más dramática, la menos truculenta para creer que nuestros funcionarios no son tan hijos de la chingada, pero eso es imposible, todas tienen su grado de valor: 
Una maestra de primaria cuya directora en busca de echarla para traer a sus amistades azuzó a las madres de familia para correrla y no conformes la acusaron del robo de un celular, que ni existió, pero que le reportó tres meses de prisión y una lucha de cuatro años para recuperar su plaza luego de miles de oficios a la SEP, a la CDHDF, a los medios de comunicación, incluso a la  presidencia de la república.
Un anciano que al regresar de trabajar subió a un microbús, cuyo chofer aceleraba y frenaba como si fuera solo, hasta que causó un accidente que dejó inválido a este trabajar de la construcción, el mismo que buscó una indemnización de la línea de transporte, pero que solo recibió burlas.
Una mujer que por ir a trabajar dejó a su hija libre con la computada, sin siquiera enterarse que halló un amigo de Puebla que la sacó de su casa, solo para llevarla a matar a un hotel de aquel estado, y aunque fue detenido luego logro su libertad por ser abogado e integrante de una de las familias más reputadas y adineradas de la ciudad de los ángeles.
Un joven que con ilusión compro un teléfono celular en Telcel, mismo aparato que que como poseído se conectaba solo a internet, lo que le redituó exagerados recibos que pese a no ser su problema debía pagar, sin que la empresa Nokia o Telcel le resolvieran, hasta que terminó por recomendarle la telefónica ¿y si lo mantiene apagado?    
Una familia que fue arrollada con todas las agravantes por un sujeto, que en la fiesta donde estaban acosaba a la sobrina de estos, quienes salieron para no tener problemas, aunque éste los alcanzó con su carro y al grito de “los voy a matar” los atropello matando al jefe de familia. Fue detenido, pero con la acusación de homicidio imprudencial, pese a que era señalado por los agredidos.
Un grupo de vecinos que deben pagar la luz a un líder de la colonia, que los mantienen asustados con correrlos porque es quien logró el predio.
Hombres y mujeres que han sido corridos de sus trabajos, sin que les hayan dado un centavo o funcionarios que tienen todas las pruebas de corrupción pero temen darlo a conocer porque el jefe es amigo del revisor
Y así se tejen las historias una a una detrás de ese escritorio, cada una digna de un libro, donde se empiece con la frase ¿Cómo pude perderse una joven, una noche, cerca de Ciudad Universitaria y que la policía no pueda hallarla, acaso es posible el crimen perfecto?

lunes, 14 de marzo de 2011

Por Adalberto Villasana (jefe de información La Prensa)

EL BRUJO DE CATEMACO, VERACRUZ.

Lo ideal es siempre estar en el lugar de los hechos, pero en algunas noticias por sus características no siempre es así. Recuerdo el caso del asesinato de un hombre en Catemaco, Veracruz; ahí el traslado era difícil. En la mañana recibí una llamada en la redacción, una persona indicó que había sido ultimado uno de los principales brujos de la región.
La noticia era por sí sola trascendente, pero un traslado era complicado por el tiempo que nos llevaría llegar y al hacerlo ya no habría nota fresca, solo información en el lugar de los hechos; las entrevistas serían con testigos presenciales, aunque no estaba garantizado que hablaran, por el tipo de víctima.
 Comenté el caso con mi compañero, Leonardo Cortés Chávez, entre ambos nos dimos a la tarea de sacar los datos por teléfono.
 En esta ocasión el trabajo se desarrolló de otra forma, “a larga distancia”. En primera instancia nos comunicamos vía telefónica al Puesto de Mando de la Cruz Roja en la ciudad de México, ahí nos dieron el número telefónico del destacamento de la Benemérita Institución más cercano al lugar, en este caso San Andrés Tuxtla, el rescatista encargado nos comentó que no llegó al lugar, pero nos aportó todos los datos que escuchó por el radio comunicador; además nos dio el teléfono de la policía ministerial.
 Al comunicarnos telefónicamente con el Ministerio Público, luego de identificarnos como reporteros de LA PRENSA, y que hablábamos desde la ciudad de México, un tanto escéptico accedió a proporcionarnos información. Así logramos sacar adelante una noticia, que se generó a raíz de una llamada a la redacción desde un lugar lejano, pero al utilizar las herramientas a nuestro alcance se reunió tal cantidad de información que dio para la nota principal de policía de ese día.
 Fueron muchos los días y las noches que estuve con los compañeros de la fuente policiaca en el trabajo diario de capturar la noticia, por lo que expreso un reconocimiento a los amigos con los que compartí la experiencia única e irrepetible de cubrir policía en LA PRENSA en la década de los 90, cuando el equipo estuvo conformado por: Elías Chávez Carvallo, José Antonio Chávez Sánchez, Leonardo Cortés Chávez, Noel Francisco Alvarado Morales, Antonio de Marcelo Esquivel, Roberto Balderas, Armado Maceda, Tomás Rojas Madrid y Álvaro Velázquez Manzano.